Page 56

Tres miradas a la historia contemporánea (electronico)

La oposición en ciudad deL carmen aL partido sociaLista agrario de campeche A. May miento de la elección de Flores como gobernador, al aducir que no tenía va- lidez porque sólo había competido el Socialista Agrario en la justa electoral.23 Ambos propusieron al presidente Obregón y a las cámaras federales la desaparición de poderes en el estado campechano, lo que provocó el reclamo de los legisladores federales yucatecos como Miguel Cantón, quien argumentó que los socialistas de Campeche gozaban de las simpatías del pueblo y que el intento de los senadores por desconocer los poderes en la entidad sólo buscaba entorpecer el desarrollo del gobierno y nombrar a al- guien que sólo fuese instrumento de ellos.24 En consonancia con este apoyo y como resultado de su inteligencia política para sostener a sus aliados en el poder, Obregón respaldó a los socialistas, ganándose aún más el favor de estos, quienes subrayaron la actitud democrática del presidente al respetar la soberanía de los estados y los principios constitucionales.25 A pesar de este fracaso, los representantes federales de Campeche elec- 57 tos en julio de 1922, el diputado federal por el segundo distrito, José L. Cer- vera Certucha, y Field Jurado, no perdieron la oportunidad para mostrar su enemistad con Flores y seguir obstaculizando su gobierno, al grado de acu- sarlo de entregar la soberanía del estado a Yucatán. De este modo, según ellos, quien dirigía el destino de Campeche era Felipe Carrillo Puerto, el “jefe del bolchevismo” en ambos estados. En este punto vale la pena señalar que los representantes de Campeche no estaban tan equivocados, ya que el líder del socialismo en Yucatán no perdió la oportunidad para hacer sentir su influencia en los asuntos internos de Campeche. Él era un político práctico y procuró tomar las decisiones per- tinentes que le permitieran erigirse como la figura más influyente dentro de su estado y en el resto de la península. Por ejemplo, en el caso de Campeche, cada vez que el gobierno de Flores enviaba alguna comisión a entrevistarse con el presidente para tratar asuntos del estado, Carrillo escribía al mandata- rio nacional para recomendarlos y solicitar que se los recibiera, cuando esa función correspondía al gobernador.26 Sumado a ello, y aprovechando su ascendente político, continuamente estaba en contacto con los campesinos de las localidades del norte de Campeche, con quienes mantenía reuniones frecuentes e intercambiaba opiniones. La relación entre los gobernadores de la península fue tan estrecha que hasta se acusó a Ramón Félix de ser un simple pelele de Carrillo.27 D. R. © 2013, Instituto Mora Se autoriza la reproducción total o parcial de este artículo, siempre y cuando se cite la fuente.


Tres miradas a la historia contemporánea (electronico)
To see the actual publication please follow the link above