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Las inundaciones en el Distrito Federal... J. P. Quiñones Valle, pero aún quedaban pendientes las crecidas del oriente, sur y centro que desembocaban en el lago de Texcoco (Perló, 2009). A pesar de las grandes obras que se habían creado para evitar las inun- daciones, durante los años de 1628 a 1630 se registraron varias crecidas, las cuales motivaron a algunos pobladores a cambiar de residencia; siendo la ciudad de Puebla uno de los destinos más recurrentes. Lamentablemente, en los años de 1795 y 1878 se registraron nuevamente fuertes inundaciones en la capital. A lo largo de los años era evidente el paradigma español sobre “la ciudad”, el cual pensaba sólo en desecar los lagos que amenazaban a los pobladores, no buscando alternativas para aprovechar los accidentes del te- rritorio y la vocación lacustre de la cuenca hidrológica del Valle de México. Debido al fuerte impacto que causaban las inundaciones y al continuo crecimiento de la ciudad, se necesitaron nuevas obras hidráulicas para ir regulando el problema. Para ello, la segunda gran obra, realizada por Porfi- 127 rio Díaz, inició en 1886 y, tras catorce años de trabajo, logró culminarse en 1900 con la inauguración del Gran Canal del Desagüe. Entre 1930 y 1950, con la industrialización manufacturera y la sustitu- ción de importaciones, se produjo un crecimiento acelerado en la ciudad, debido a que su población creció 1.5 veces. Esto generó un proceso de ex- tensión urbana, el cual daría paso, en pocos años, a la Zona Metropolitana del Valle de México.8 A consecuencia del crecimiento demográfico, para la década de 1930 el Gran Canal del Desagüe se volvió insuficiente. Y nuevamente las calles del centro de la ciudad de México se inundaron. Ante la urgente necesidad de acciones, el gobierno decidió ampliar el Gran Canal9 realizando el segundo túnel de Tequixquiac.10 Dicha obra se realizó entre los años 1937 y 1947. Uno de los grandes problemas que ha traído la desecación de la zona lacustre del Valle de México es el hundimiento del D. F. Por ejemplo, a principios del siglo xx se fueron dando hundimientos de 2 a 5 cm anuales, pero entre 1938 y 1948 los hundimientos del centro de la ciudad fueron de aproximadamente 18 cm por año, y para 1959 algunas partes de la ciudad alcanzaron 50 cm por año.11 Este fenómeno de hundimiento también afecta a municipios conurbados como Chalco, Nezahualcoyotl, Naucalpan y Eca- tepec (ddf-dfcoh, 1997). D. R. © 2012, Instituto Mora Se autoriza la reproducción total o parcial de este artículo, siempre y cuando se cite la fuente.


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