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Representaciones y practicas sociales

RepResentaciones y pRácticas sociales isbn: 978-607-9294-01-4 nes propuestas y novedades que sobre el ámbito de la guerra aérea y la ae- ronáutica iban surgiendo. Pero muchos de los contenidos no eran necesaria- mente novedosos, correspondían a discusiones ya superadas en otras partes del mundo, pero que en los países que apenas comenzaban a ponerse al día en lo que a las ideas de la guerra se refiere, eran aún problemáticas frescas. Es posible definir etapas en la revista a partir de cuestiones muy visibles y sin entrar en un análisis profundo. Hemos decidido, por el momento, no intro- ducir a los directores de la revista como único patrón de periodización, ya que hubo momentos en los que el puesto gozó de una movilidad y mutación ex- traordinaria, situación que junto con el problema de obtener de forma rápida datos acerca de su carrera militar, nos hace dejarla como una tarea pendiente, aunque sí tomamos en cuenta este aspecto para los planos en los que poda- mos desarrollar más nuestro conocimiento sobre la misma historia de la fach. 182 Una primera etapa de la revista podemos ubicarla de 1941 a 1948; en este primer momento la publicación se encuentra bajo el mando del primer equipo editorial. El contenido es primordialmente autojustificatorio y auto- complaciente con la institución. Dohuet y Mitchell, como se ha dicho antes, son los principales teóricos traducidos; sin embargo, el nombre de Alexander Seversky empieza a sonar por estos años. En el número 9, correspondiente a abril-junio de 1943, se organiza un concurso para traducir Victory Through air Power,33 considerado el libro más importante de Seversky. Para este mo- mento, Seversky es sólo un autor a considerar, mas no un paradigma. Las críticas a la poca importancia que se le atribuía a esta nueva arma no sólo pueden leerse en los editoriales y en artículos; de forma por demás interesantes puede verse en caricaturas (véase imagen 1). A esto podemos agregar el contenido de las noticias que enuncian en la sección de Crónica Nacional, en la que destacan las visitas de los represen- tantes militares, sobre todo latinoamericanos. También el contenido y número de las necrologías puede hablarnos muy claro de lo peligroso de la profesión aérea. La mayoría de los anuncios remiten a personal que oscila entre los 20 y los 30 años, y en promedio cuatro por número. Una segunda etapa podemos encontrarla desde 1948 hasta por lo menos 1956. En este momento pasa por la dirección el futuro comandante en jefe de la fach, Diego Barros Ortiz, quien dejara su huella en el estilo de la revista. La influencia estadunidense comienza a crecer, pero sobre todo Colección Cuadernos de Trabajo de Posgrado • Historia Moderna y Contemporánea • Maestría


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