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Representaciones y practicas sociales

RepResentaciones y pRácticas sociales isbn: 978-607-9294-01-4 tendencia, como Laing, Cooper o Basaglia, lo cual, nos podría indicar que, más allá de los éxitos de librería, había un interés real por el tema. Y por otro, en ese momento salieron a la luz una docena de obras de autores mexicanos o de extranjeros radicados aquí que giraban en torno a la antipsiquiatría en México o en el exterior.26 Por último, el cine mexicano también expresó esta posición crítica y de cuestionamiento hacia la psiquiatría y los manicomios, como apreciaremos ahora en la segunda parte de este trabajo. la influencia de las ideas antipsiquiátricas en el cine mexicano Tras el término de la “época de oro” del cine mexicano, en la década de 216 1960 la industria se enfrentó a una gran crisis que se expresó no sólo en el descenso de la producción de películas, sino también en el agotamiento de las temáticas tradicionales. Ante esta situación y como parte de un programa de intervencionismo mediático estatal, en 1970 el gobierno mexicano deci- dió participar en la producción del cine nacional. Durante la presidencia de Luis Echeverría al parecer las cosas no se hicieron tan mal; sin embargo, con José López Portillo de nuevo se cayó en una crisis que devino en la era de las películas de ficheras en los ochenta.27 Coincido con el historiador del cine mexicano, Emilio García Riera, que nunca antes ni después de los setenta “accedieron tantos y tan bien preparados directores a la industria cinematográfica, ni se disfrutó de mayor libertad en la realización de un cine de ideas avanzadas”. Asimismo, “los nuevos cineastas resultaron capaces por cultura y por oficio de reflejar en sus películas algo de la complejidad y la ambigüedad de lo real”.28 En efecto, es en esta década cuando hizo eclosión un cine mexicano crítico contrario en espíritu al sim- plismo del conservador y moralista cine convencional de la época de oro. Los nuevos directores manifestaban preocupaciones sociales y políticas nada comunes anteriormente. En ese sentido, por ejemplo, resultan notables Las po‑ quianchis (1976), de Felipe Cazals; La pasión según Berenice (1975), de Jaime Humberto Hermosillo; Los albañiles (1976), de Jorge Fons, entre muchas otras. Desde mi perspectiva, mucho más rico e interesante que los filmes de la época de oro, el cine setentero mexicano dio muestra de una crítica hacia el Colección Cuadernos de Trabajo de Posgrado • Historia Moderna y Contemporánea • Maestría


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