Page 220

Representaciones y practicas sociales

RepResentaciones y pRácticas sociales isbn: 978-607-9294-01-4 entrada del infierno: “Renunciad a toda esperanza vosotros que entráis aquí.” Los símiles entre el manicomio y el averno no terminan ahí. En Los renglones torcidos de Dios, Alicia exclama: “Me voy a volver loca de verdad en este infierno.” Y más adelante, un ex paciente le declara: “En estos meses te he visto como polizón en el infierno, eras la única línea recta entre los renglones torcidos de Dios.” En la cinta de Sergio Olhovich no queda muy claro –aun al leer la novela en que está basada– si “el infierno de todos tan temido” se re- fiere a la vida en los manicomios o a la experiencia de la locura; sin embargo, es evidente que se alude a un mundo entre tinieblas y tormentos. También, en las cuatros películas se pondera el carácter punitivo de los manicomios. En Los renglones torcidos de Dios, tras una fuga fallida, Alicia es enviada en camisa de fuerza a “la unidad de dementes profundos”, ante lo cual ella pregunta a una enfermera: “¿Es que estoy presa?”, “En cierto sentido 222 sí, forma parte del castigo”, responde esta. En María de mi corazón sucede algo parecido con la protagonista cuando es castigada por introducirse en las oficinas y romper varios vidrios. María, inconsciente y envuelta en una sába- na, es llevada a un sucio y desagradable pabellón de enfermas oligofrénicas, donde permanecerá el resto de su estancia. Y en El infierno de todos tan te‑ mido, Jacinto y otro paciente comentan que un intento de fuga era castigado al menos con cinco días en las bartolinas, pero “en una de esas”, señalan, “hasta te mandan a la ‘casa gris’; ahí es donde tienen a los ‘definitivos’, el que llega a caer ahí ya no sale”. Como vemos, está presente una visión sumamente negativa de los ma- nicomios la cual es mantenida puntualmente en las representaciones de los psiquiatras que ofrecen nuestros filmes, como veremos en seguida. las iMágenes De los Psiquiatras Si para la antipsiquiatría los manicomios fueron lugares poco científicos y terapéuticos, en consecuencia sus dirigentes y encargados, es decir, los psi- quiatras, fueron considerados como charlatanes, tiranos y opresores. Ellos, finalmente, eran los causantes del sufrimiento de los locos en los manico- mios, pues se establecía una relación de poder desigual entre los médicos y los pacientes. Esta autoridad también podía ser extensible a los enfermeros. Colección Cuadernos de Trabajo de Posgrado • Historia Moderna y Contemporánea • Maestría


Representaciones y practicas sociales
To see the actual publication please follow the link above